¿Quieres tener más dinero en tu bolsillo pero no sabes cómo? ¿Siempre has querido ser tu propio jefe y tener tu negocio? ¿A tu amigo el emprendedor le va súper bien y tú quieres intentarlo? ¡No lo pienses más! Arriesgarte y empezar será una decisión difícil, pero de la que no te vas a arrepentir.
Usualmente, tomar la decisión de emprender cuesta tanto porque te limitas únicamente a ver lo malo y a pensar en las cosas que podrían salir mal. Es importante que te alejes de la negatividad y dejes a un lado el miedo a equivocarte.
Errar es de humanos y por esto queremos que aprendas a identificar los errores más comunes al momento de emprender, para que no los cometas y sepas que vas por el camino correcto.
1. No planificar
La planificación es el paso más importante para llevar a cabo tu proyecto, y más si se trata de un negocio que apenas estás iniciando. Por eso, define tus objetivos, las metodologías, el presupuesto y las metas a cumplir, esto te ayudará a tener claridad sobre a dónde te diriges y tomar los caminos correctos.
2. No investigar
La investigación es una parte fundamental para llevar a cabo tu emprendimiento. Si omites eso, puedes estar perdiendo tiempo, detalles e ideas que pueden mejorar la calidad y servicio de tu producto.
Pero… ¿Qué debes investigar? En primera instancia, tu público, que les gusta, qué producto es el ideal y cómo sería la mejor forma de venderlo. Conoce tu competencia, si bien, no debes fundar las bases de tu producto en tus contrincantes, lo más adecuado es que reconozcas sus fallas, aceptes sus virtudes y construyas una propuesta de valor mucho mejor. Investiga sobre finanzas, saber cómo llevar las riendas económicas de un emprendimiento te ayudará a manejar esta situación de mejor forma y reconocer posibles oportunidades o peligros financieros.
Investigar te abrirá puertas e incentivará a trabajar en función de mejorar tu emprendimiento, crear y sostener un producto sólido y fundamentado, que sea auténtico, funcional y viable.
3. No confiar
Desconfiar de tu propuesta puede ser muy perjudicial para tu emprendimiento. Si quieres tener éxito, debes estar 100% seguro de tu proyecto, de lo que es y lo que te representa, puesto que esto es muy evidente al momento de compartir tus ideas y todo aquello que pienses sobre tu emprendimiento se verá reflejado en él.
4. No proyectarte
Si bien debes tener los pies en la tierra y analizar cada circunstancia de acuerdo con el presente, no está de más soñar y concebir tu idea de negocio como muy exitosa. Proyectarse en un futuro te ayudará a ver posibilidades para explotar al máximo el potencial de tu emprendimiento y alcanzar poco a poco lo que tanto has soñado. ¡Sueña en grande! Cuando se trata de proyección los límites no existen.
5. No analizar
Toda acción da un resultado y eso es exactamente lo que tú debes analizar. El análisis nos permite conocer lo que está funcionando y lo que debemos mejorar, para modificar todo aquello que está impidiendo la evolución de nuestro proyecto y transformar los errores en oportunidades de mejora.
Pero… ¿Qué se considera como resultados? Las percepciones y comentarios de tus clientes, la interacción en tus canales de comunicación, las sugerencias de personas externas y demás aspectos que te permitan conocer el impacto que has tenido con tu modelo de negocio. ¡Fíjate en ellos! y actúa en función de eso.
Saber qué hacer resulta una tarea intuitiva, pero conocer verdaderamente las falencias en las que puedes caer, es una ventaja que visibiliza los errores para evitar que los cometas, y si lo haces, saber cómo actuar ante eso. Deja de lado el miedo y empieza a vivir el sueño de ser tu propio jefe ¡Tú puedes!