Les queremos compartir un artículo del periódico el tiempo donde realizan un análisis de lo que ha pasado con el mercado del microcrédito en Colombia con base en un informe del Fitch Rating, una de las tres principales agencias globales de calificación con experticia y conocimiento del espectro crediticio mundial.Por: El Tiempo, Rolando Lozano Garzón Redacción Economía y Negocios
Crezcamos y CSC operarán como financieras y Bancamía recibirá inversión del Banco Mundial.
El tamaño de la cartera, que en los últimos cuatro años pasó de 8 a 13,4 billones de pesos, es decir, creció el 67 por ciento, lleva a entidades y bancos de microfinanzas a anunciar su conversión en compañías financieras y a otras a realizar nuevas operaciones para mejorar la posición competitiva.
Así, las que no están facultadas podrán captar recursos del público, bajo la vigilancia de la Superintendencia Financiera, podrán ensanchar las fuentes de fondeo y acelerar el crecimiento. Según analistas, las entidades de microfinanzas colombianas afrontan una penetración creciente de otros proveedores de crédito para personas y negocios como bancos especializados y organizaciones no gubernamentales (ONG).
Crezcamos, una sociedad que se enfoca en la población rural y semiurbana de los departamentos del nororiente del país, podría concretar en el 2017 su plan de transformarse en compañía de financiamiento
Los análisis de Fitch Ratings Colombia indican que tiene una escala relativamente pequeña, pues ocupa la posición 11 en el ´ranking´.
No obstante, Crezcamos tiene una alta generación interna de capital que le permite una buena posición para sostener un crecimiento fuerte en el largo plazo.
Paralelamente, cuenta con un alto nivel de solvencia, pues en 2012 los fondos de capital europeo le inyectaron 12.000 millones de pesos, y rige un compromiso de los accionistas de reinvertir hasta 2016 el ciento por ciento de las utilidades del organismo.
Cabe recordar que Crezcamos es controlada accionariamente, con 55 por ciento, por los fondos de capital privado Rural Impulse Fund I y Rural Impulse Fund I I, que son de Luxemburgo y administra Incofin, una gestora de inversiones de origen belga.
Igualmente, son propietarios de la institución, con el 21,6 por ciento, Development International Desjardins (DID), fundación del grupo canadiense Desjardins, y ASN-Novib, una gestora holandesa de fondos de capital privado enfocada en el sector.
El restante 23,3 por ciento de Crezcamos es propiedad de personas naturales colombianas.
Aunque el acuerdo de accionistas de incluye igualmente en 2017 la venta de las participaciones de Rural Impulse Fund I y Rural Impulse Fund II, la permanencia de estas entidades en la composición accionaria de Crezcamos podría prolongarse.
Un análisis de Fitch Ratings Colombia dice que los clientes objetivo de Crezcamos se caracterizan por tener un máximo de 10 empleados y activos hasta 500 salarios mínimos legales mensuales.
Así las cosas, para compensar los altos gastos operativos que significa el mayor grado de contacto directo con los clientes, el organismo mantiene un margen de interés amplio y una productividad elevada por empleado.
A junio del 2014, contaba con una participación de uno por ciento sobre la cartera bruta total del sector de la microfinanzas y 69.378 prestatarios.
También posee 49 oficinas que se caracterizan por estar ubicadas en zonas rurales relativamente marginadas y con bajos niveles de bancarización. (ver artículo completo aquí)